Placas Conductoras

Placas de material conductor, una herramienta innovadora de nuestra gama Montessori Premium, están diseñadas para fomentar el desarrollo de la capacidad para distinguir propiedades térmicas como caliente, fresco y frío. Este conjunto es una excelente elección para la educación y aplicaciones terapéuticas, ofreciendo una oportunidad única para experimentar y organizar las diferencias de temperatura.

Estas placas están fabricadas para aislar las propiedades de conducción térmica de diferentes superficies, lo que las hace perfectas para refinar la habilidad de reconocer la temperatura de las superficies. La actividad, diseñada para realizarse con los ojos cerrados o vendados, estimula al usuario a concentrarse en el sentido del tacto y no en las observaciones visuales, creando así una experiencia sensorial única.

El conjunto consta de una caja de madera dividida en 5 compartimentos y contiene cinco pares de placas de 8 x 4 cm, hechas de piedra, vidrio, corcho, madera y metal. Esta diversidad de materiales proporciona diferentes sensaciones de temperatura y es una herramienta excelente para comparar, describir y aprender sobre temperaturas, a la vez que promueve la sensibilidad de las manos y contribuye a la expansión del vocabulario.

El producto ofrece diversas oportunidades de aprendizaje:

• Examinar materiales en el espacio por sus propiedades de conducción térmica.
• Descubrir si los estímulos térmicos se sienten de manera diferente en diferentes lugares.
• Determinar qué materiales son adecuados como superficie para sentarse.
• Sostener las placas durante mucho tiempo para observar los cambios.
• Enfriar las placas en el refrigerador o calentarlas al sol y describir las observaciones.

La caja de madera tiene un tamaño de aproximadamente 13 x 10,8 x 5,7 cm y cada placa mide aproximadamente 8 x 4 cm, lo que hace que el producto sea práctico y fácil de almacenar.

En Senso-Care, entendemos la importancia de la calidad, especialmente en contextos educativos y terapéuticos. Por eso, nuestros productos de madera, cuando corresponda, están certificados por el FSC, lo que representa una silvicultura responsable y sostenible.